domingo, 7 de marzo de 2010

50 años de la Minifalda,de resistencias, revueltas y prisiones


Se cumplen 50 años de la invención de la minifalda, de su aparición en el mercado como símbolo de la liberación femenina, recuerdo a mi madre vistiendo unas minifaldas a cuadraditos rojos, recuerdo que yo solo me las ponía para ir a colegio de monjas, con el uniforme único, para hacer rabiar a las inquisidoras. Esas minifaldas que me daban una sensación de ligereza también me producían una impresión intensa de vulnerabilidad, y yo me resistía a no usarlas, cruzaba las piernas, las dejaba levantarse con el viento, provocaba; en el fondo, sentía cierto temor. Ese miedo de la violencia masculina ha pasado con los años, o ha disminuido conforme me he ido construyendo como sujeto, y también el uso de la falda corta (siempre para no acatar imperativos) por otras de color opaco y hasta la rodilla. En mi primer viaje a París recuerdo que me compré una falda roja, de algodón tejido, en una tienda muy bonita de la calle Passy, la llevaba con una chompa tejida de algodón azul, y me sentía muy elegante con ella. Era corta, pero tenía una caida suave y me acariciaba las rodillas. En Lima, los halagos eran ofensivos, en París, más valorizantes: vous etes tres belle, Madame, que, para empezar es una linda palabra (en comparación con la desprecitiva Señora, es decir un Señor con "a", en lugar de Ma Dame, mi dama), y eso me dejaba usar las mini, mini faldas sin complejos ni tanto miedo. Podría haber escrito: historia de la minifalda, historia del miedo, miedo de la ofensa, de la violación, etc...

Es decir que la minifalda fue una conquista necesaria para no usar "ese uniforme de la desolación" que es el pantalón, pero que pornto será ttambién otro símbolo de liberación, del que hablaba Baudelaire. Me doy cuenta de que ahora casi no me pongo falda, no me siento tan bien con ellas y encuentro pocas que me gustén. Prefiero las largas, y no sé si es subconsciente. Lo que busco son prendas que me dejen la cabeza tranquila, nada de prisiones, ni de trapos molestosos!! Y la burka?? Horror, no puedo imaginarme que haya mujeres que se vean obligadas a llevarlas, podría matar...
Fuera de ese lamentable e humillante "Día de la mujer", como si fuésemos una minoría!, quería acordarme de mis faldas rojas, azules, a cuadraditos, plisadas, recogidas. Recuerdo que una vez, en Lima, llevé a un amigo a que eligiese entre la ropa que no usaba mi ex, ido a París en un ataque de pánico, y que se echó a reír cuando vio todas mis faldas cortas alineadas, una cantidad impresionante de minis.